Quisiera iniciar una campaña de objeción fiscal. O lo que es peor, hacer un alegato por la sanidad privada. Me niego a contribuir económicamente en la recuperación médica del sujeto que aparece corneado en la foto (paciente SACYL) o en la de otros muchos que puedan sufrir lesiones en similares circunstancias. Quien quiera participar activamente en estos espectáculos aberrantes que suscriba un seguro privado y firme un documento responsabilizándose de sus actos. Ebrios o sobrios. O eso o que la Seguridad Social instaure de una vez el Régimen Especial de los Tontos del Pueblo Honrando a su Patrón/a. Por remota (o no tan remota) analogía yo lo integraría en el Régimen Especial de los Profesionales Taurinos. No sé que pensarán los puristas.
La imagen representa con elocuencia el concepto (no tan residual) de la España garbancera. Y nunca mejor dicho porque está tomada en Fuentesaúco (Zamora)