Este fulano que hace amago de besar un salmónido ya apareció por aquí hace casi un año. Me sorprende leer en la sección de Comunicación de El Mundo (14/01/07) un artículo sobre su figura. Me pregunto si el desembarco que en su día predije está en ciernes.
Este cocinero argentino tiene la rara virtud de poder hacerte pensar que es un auténtico payaso mientras despelleja y desespina un lenguado, sin dejar de mirar a la cámara, con una exquisita técnica y en tiempo record. Es muy bobo y muy bueno.
Durante una temporada en la que consumía, no mucha pero sí significativamente más televisión que ahora, Ariel Rodríguez Palacios fue uno de mis entretenedores favoritos. Se alternaba en el ranking con las entidades bidimensionales Stewie Griffin y Shinnosuke Nohara.
