A los burgaleses, a decir de los anuncios publicados en la prensa local, se nos atraganta bastante la lengua francesa. (Contra todo pronóstico en castellano fetén también se escribe maître).
A modo de réplica, doy fe de que a un súbdito/a del país galo (que por lo visto ha perdido su carte d'identité) se le ha pegado nuestro entrañable leísmo.