Un complemento casi indispensable en un coche tuneado son los cartelitos de SE VENDE pegados en las lunas (tintadas) de las puertas de atrás.
Es-te, sim-ple-men-te se ve. (Léase esto con tonillo anormalmente pausado y chulesco).
De igual manera pronúnciese la marca del vehículo como indica el link. (La primera locución es la japonesa; la segunda, la más relajada anglosajona). Qué buena iniciativa forvo.