22/2/09

Se alquila


En realidad era un local en la Plaza de la Libertad lo que se alquilaba.

Le escuché decir a alguien que la libertad, esa magnitud tan escasa y escurridiza, se puede medir: responde exactamente al tiempo de más que puedes pasarte en el cuarto de baño. Supongo que se referiría al propio. Porque si se incluyen todos los aseos como surtidores de independencia, sospecho que sé quién es la persona más libérrima del planeta.